Hoy los cientos de estudiantes que dieron la PSU conocerán su puntaje. Los nervios predominan, junto con las ansias de querer saber finalmente si podrán postular a la carrera que desean. Entre ellos se encuentran los que han elegido una opción bastante particular: el camino de las artes, los que quieren ser artistas.
Santiago, Chile.- Quizá uno de los momentos más complicados para un joven es elegir a lo que se dedicará el resto de su vida. Para muchos, los diecisiete o dieciocho años es una edad demasiado apresurada. Es por eso que algunos se toman años sabáticos o tiempo para decidir finalmente lo que quieren. Mientras hay otros que siempre han querido algo en especial. Desde pequeños manifestaron un talento en específico o en el camino se dieron cuenta que era lo que más les apasionaba. En ese grupo, encontramos a los artistas.
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Las letras, el teatro, la pintura, la estética, el cine y muchos más. Futuros escritores, poetas, artistas visuales, están esperando el momento para saber sus puntajes. Sólo así podrán postular a las universidades donde imparten su tan anhelada carrera. Sin embargo, además del decidir qué estudiar, también deben enfrentarse muchas veces a su familia que no está de acuerdo cien por ciento con esta decisión. No elegir una carrera tradicional, no ser el abogado, doctora, ingeniero resulta un conflicto.
Un ejemplo
Sebastián Luengo (20), alumno de Cine de la Universidad de Chile y primer matriculado con relación al puntaje en su generación, nos cuenta: “Entré a Cine porque siempre me gustó todo lo que tenga que ver con creación de cosas” . Y es justamente eso lo que busca un artista, una creación, mostrar un mundo nuevo a las personas. Mas el estudiante nos cuenta que no fue eso solo lo que le llamó la atención en primera instancia. “Me gustaban mucho las Ciencias, porque cualquier carrera relacionada a eso era mucho más rentable que dibujar o escribir o fotografiar”.
El dinero también es siempre una problemática “¿de qué vivirás?” preguntan múltiples veces los padres. No sólo ellos, también la familia o amigos en general, y es que muchas veces en el país no se valora lo suficiente al artista. Sin embargo muchos son los “valientes” que de igual manera desean emprender este viaje lleno de creación.
Además, Sebastián nos cuenta que afortunadamente sus padres lo apoyaron de inmediato. “Primero estaban confundidos (…) les daba cosa que estuviera tomando una mala decisión, pero no por plata o tema laboral, sino por mi felicidad”
Es por eso que una de las cosas que hay que tomar en cuenta al momento de decidir un camino artístico es la felicidad. El enfrentarse al mundo, el llevar ideas nuevas, el transformar y revolucionar un ambiente con creación y un tipo de magia que sólo se produce en base de letras, pinturas, cámaras, indumentaria especial, y por sobre todo, el amor y la valentía para llevar a cabo el propósito de lo que realmente se quiere ser.
En CaféVirtual le decimos a todos los futuros artistas que están a punto de matricularse en una universidad o instituto: ¡Éxito! Y felicidades por formar parte de un mundo especial como son las artes. Y si eres uno de los que aún temen por el qué dirán, piensa siempre que eres tú el dueño de tu propio pincel, de tu película y de tu libro, no el espectador, sino el director.
Ángela Silva D.
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