El programa Citoyens entrevistó al escritor recientemente. Compartimos aquí, parte de la historia
Santiago, Chile.- Quizás fueron las erres de su nombre las que lo hicieron amar el sonido de las palabras desde pequeño, quizás. Rolando Rojo Redolés nació en Ovalle (1941) y a raíz del trabajo de su padre- vinculado a los ferrocarriles, al igual que el de Neruda- debió crecer a la capital por un tiempo. Más tarde, tras volver al norte, se convertiría en profesor de castellano, dando paso, poco a poco, a su pasión por la escritura. Ganador de una gran cantidad de premios literarios, es candidato al Premio Nacional de Literatura. El programa Citoyens 102.5 FM conversó con el escritor recientemente. Compartimos algunas claves de la entrevista.
De acuerdo al escritor, su inclusión en los nominados al premio implica una responsabilidad “Por la cantidad y calidad de los escritores que lo han recibido”. La postulación, responsabilidad de Mago Editores, fue apoyada de inmediato en reconocimiento a su doble labor: la excelencia de escritura y la docencia. Ambas pasiones que alimentan su vida, entre otras labores.
La historia vinculada con Rolando Rojo Redolés
Durante los años ’70 fue funcionario del Ministerio de Educación. Para el Golpe de Estado fue recluido en el Campo de Concentración de Chacabuco, en el Norte Grande. En esa época escribió su primer poema. El resto de los detenidos sería su primer público. Aquí, el lema de que las crisis constituyen una oportunidad fue real. Una dura experiencia que generó la necesidad de crear y retratar ese tiempo de dolor para toda una generación.
La temática que inspira a Rolando Rojo Redolés es amplia e incluye geografía humana, dictadura y exilio. La persona está presente en sus escritos y la experiencia adquirida en conversaciones con su abuelo se convirtió en novela. “El último invierno de mi abuelo” fue su homenaje para aquel hombre.
Los personajes de su vida
Alberto, un personaje que a Rojo le recuerda a si mismo. En el “Cumpleaños”, es un hombre infeliz después de varios fracasos de todo tipo. Es un “perdedor” del siglo pasado, el que termina suicidándose. El escritor confiesa en la entrevista de Citoyens que hay mucho de él en ese personaje, a propósito de su “sentido pesimista de la vida” que muchas lo ha puesto en situaciones extremas de las que ha logrado salir.
En 1975, durante su exilio en la Argentina, se acerca a la ‘Asociación para Refugiados’ europeos que mantenía el gobierno argentino en provincias. Allí se dirige a la pampa, donde figura como bibliotecario. No está solo, debe compartir con toda clase de personas, entre ellas nobles rusos, ex jerarcas nazis y exiliados sudamericanos. La experiencia quedó registrada en “La muerte de la Condesa Prokovich”, su primera novela.
“El mundo no cambia en una tarde de sábado, Susy”, es un relato que narra en forma paralela, el derrumbe conyugal y la decadencia de los barrios de los años 50 y 60 en Chile.
“Usted es un escritor clandestino”, cuenta Rojo Redolés que José Miguel Varas– escritor, periodista y locutor, Premio Nacional de Literatura- le habría dicho. A propósito de que el escritor nunca ha sido publicado por una editorial grande.
En la entrevista, Rolando Rojo Redolés señaló que está en espera del resultado, pero el trabajo no se detiene. Ahí sigue él haciendo sus talleres literarios y escribiendo todo lo que puede.
Fuente: Citoyens.cl
Volver a escuchar la entrevista: viernes 20 de julio.
